Una mirada integral sobre el cuerpo

Al obtener un aceite esencial, destilamos la parte material de la planta para obtener una síntesis de las moléculas terpénicas y aromáticas que suponen el principio activo, original de dicha planta.
Sin embargo, al hablar de cuerpo esencial, no vamos a pensar en un proceso de destilación, sino de integración, de entender que nuestro cuerpo se va conformando por un conjunto de procesos en los que intervienen nuestro cerebro-mente, nuestra genética, la actividad física, las emociones y los hábitos alimentarios, entre otros factores.
Pero sobre todo, en ese conjunto de procesos, hay que tener en cuenta el sistema de recompensa: una red de estructuras cerebrales que en respuesta a estímulos externos produce una liberación de dopamina y de emociones positivas. Es un sistema básico de supervivencia que nos lleva a repetir acciones consideradas beneficiosas para el organismo de las que guardamos memoria y con las que aprendemos, mal, pero aprendemos. Por eso no dejamos de dar paseos a la nevera para comer dulces –entre otras cosas-.
Normalmente, comemos más por el deseo que por el hambre. Pero no vamos a quitarnos los deseos, vamos a dejarlos ahí y vamos a saber establecer con ellos una buena convivencia que nos permita un cierto grado de felicidad que nos permita mirarnos al espejo cada mañana y no cerrar los ojos.
Desde la inconsciencia, el no querer saber lo que nos pasa y cuál es la mejor forma de relacionarnos con ello, podemos estar incurriendo en adicciones. No es que la comida sea una droga, a pesar de que necesitamos comer casi cada día, sino que ciertos alimentos son capaces de alterar nuestro circuito de recompensa y convertirse en potenciales adicciones, como ocurre con los dulces, el azúcar.
En este caso concreto del azúcar, y teniendo en cuenta múltiples estudios científicos, su consumo habitual produce niveles de dopamina prolongados que interfieren las vías de gratificación. Necesitaremos consumir cada vez más cantidad para alcanzar el mismo grado de satisfacción y se creará al mismo tiempo mayor susceptibilidad a la liberación de dopamina. Si dejamos de tomar, se produce ansiedad e incluso depresión.
La conclusión de todo esto no deja de ser una llamada de atención a cómo podemos intervenir en aquello que está transformando nuestro cuerpo y que no se soluciona únicamente comiendo menos, negándonos a comer azúcar o llevando una dieta estricta. Hay que buscar una integración de factores y personalizarlos en cada uno de nosotros para encontrar esa esencia, esa bonita y natural manera de ser que nos hace mirarnos y mirar nuestro cuerpo con ojos de quien sabe qué hacer para sentirse a gusto.
Profundizar, conocer y tomar decisiones conscientes es la mejor dieta que podemos adquirir para nuestra salud, para encontrarnos con nuestro cuerpo esencial.

Consigue gratis esta Guía para conocer uno de nuestros productos.

En 5 sencillos pasos conocerás y practicarás Mindfulness sin esfuerzo. Si es de tu agrado, no dudes en contactarnos. Gracias.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Ver más

  • Responsable: Estela Pérez.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Raiola Networks que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.

Ir arriba
Esta web utiliza cookies. Puedes ver aquí la Política de cookies    Ver Política de cookies
Privacidad